jueves, abril 10, 2008

UN REGALO INESPERADO

"Perú y Honduras, más cerca"...
...Así es como lo estamos experimentando Blanca Luz García, joven Hondureña de 21 años y una servidora , Inés Cornago, que he tenido la suerte de acompañar a Blanca en nombre de la Comunidad de Santa Rosa, para que junto con otras jóvenes de Chile y Perú, reciba la formación a la Vida Religiosa en nuestra Congregación.
El 10 de Marzo del 2008, llegábamos al aeropuerto de Lima, donde nos esperaban sonrientes Hna. Hilda, Provincial, y Dolores Franquelo, Superiora de la Fraternidad de Malambito. Después de los mutuos abrazos nos dirigimos a la Comunidad, donde con alegre y calurosa acogida nos recibieron las demás hermanas y las jóvenes formandas.
Al día siguiente Blanca, junto con sus compañeras recibieron las primeras clases de formación en la CONFER. Este año son cerca de 200 postulantes de las diversas Congregaciones, masculinas y femeninas, los que están recibiendo dicha formación y enriqueciéndose en la búsqueda de repsonder al llamado del Señor. Ojalá que la mayoria de estos jóvenes sigan adelante con valentía y puedan, en un futuro, dar un nuevo impulso en la vivencia de los diversos carismas. A nosotras nos queda el apoyarlas en la oración y nuestro vivir cotidiano, sencillo y alegre, entre los pobres.
El viernes 14, nuestra Hermana Provincial, Hilda Dávalos, conociendo la ilusión que yo tenía de encontrarme con la Hermana Rosario Andrés - dado que vivimos juntas dos años en Honduras - le faltó tiempo para proponerme viajar a la Selva, lo que acepté con agrado. Quiso que fuera acompañada por la hermana Dolores Franquelo, que por cierto, estuvo todo el viaje pendiente de mí, por si me mareaba, cosa que no ocurrió gracias a Dios y a todo lo que tomamos preparado con esmero por Dolores, para prevenir posibles trastornos. Los cuatro días pasados en Pampa Silva fueron vividos en gran alegría, tanto por el convivir fraterno, como el disfrutar de este hermoso lugar y la visita a una Comunidad Nativa. Un acontecimiento doloroso surgió: Hermana Luz María Ricse, a quién no he podido conocer, se encontraba en Huancayo al cuidado de su hermano más jóven, quién estaba gravemente enfermo y quien por fin murió. Debido al paro de los agricultores, no pudimos acompañarla, pero si lo hicimos desde la oración y la cercanía de las llamadas telefónicas.
De regreso a Lima, con algo de retraso debido a los huaycos, no dejé de alabar al señor admirando a lo largo del viaje el imponente y hermoso paisaje de la cordillera andina.
La Semana Santa la he pasado en la Comunidad de Malambito, viviéndola con intensidad en parte por el esmero que han puesto las hermanas y formandas en la prepararción de las celebraciones y la humilde y sencilla respuesta de la gente del barrio. El vía Crucis del viernes me emocionó... Una vez más experimenté que el vivir entre los pobres nos evangeliza.
Termino con estas líneas a pocas horas de mi regreso a Honduras, alabando al Señor por este regalo inesperado para mí y agradeciendo a la Hermana Provincial, Hilda Dávalos, por detalles y delicadezas que ha tenido para con mi persona, a todas las hermanas y jóvenes de la comunidad de Malambito, con las que me he sentido muy bien y a cuantas personas han hecho posible, se realizara este viaje.
Para mí ha sido - aparte de acompañar a Blanca, que era el objetivo - una oportunidad de conocer más hermanas, lo que refuerza los lazos de familia y un enriquecimiento mutuo.
No puedo menos de afirmar una vez más ...QUE LA FRATERNIDAD ES LO NUESTRO.

Que el Señor nos bendiga a todas, llevando la Paz y el Bien en los lugares donde nos toca vivir.

Fraternalmente
Hermana Pilar Inés Cornago.